-Enrevesado y complejo no son sinónimos, como tampoco
lo son raro y distinto.-
Edición 2014 |
Género. Ciencia ficción.
Lo que nos cuenta. En el libro La rastreadora (publicación original: 2012), la muerte de David afecta a toda su familia, en
especial a su hermano Miguel, presente durante el accidente fatal. Pero varias
personas dudan de qué sucedió en realidad. Décadas después, una Rastreadora
formada en la Gran Pirámide de Path entra en la vida de Miguel, ahora un vagabundo, con la intención de “ajustar”
su mente para prestar un servicio a la sociedad, trabajo que debera ser rematado por
un Ajustador. Pero su tarea no sigue el rumbo habitual.
Mi opinión. Trabajo de bajo ritmo porque se regodea en
sí mismo sin darse cuenta, muchas veces, que está diciendo la misma cosa una y
otra vez cambiando palabras, que ofrece un trasfondo de tecnología “de
baratillo” y casi fantástico para, supuestamente, afrontar un thriller psicológico de género (o una
novela de psiquiatría fantástica, según se vea), en la que, con la actitud
adecuada, quizá se pueda ver una crítica a ciertas actitudes totalitarias (o
no, y no soy más que yo y mi buena voluntad…), lograda en cuanto a su atmósfera
(si buscaba lo esquizoide o lo casi alucinógeno), muy difícil de clasificar, que
avanza a trompicones entre lo entretenido a veces, lo desconcertante por
momentos y lo pesado otras, nada cómoda de leer y, sin duda alguna, un producto
distinto a lo habitual.
Destacado. Sensaciones de monólogo demasiado intensas
y prolongadas.
Potenciales Evocados. Madre mía,
cómo lo explico… psicología tecnológica de la Atlántida aplicada a la limpieza
social… no sé si habré acertado… o Philip K. Dick muy bajo de forma tratando de
seguir la estela de Dan Brown… tampoco sé si acierto…
Parece interesante de leer, sobre todo si trata dominación o totalitarismo, temas que me gustan. Pero ¿la Atlántida? Eso me suena raro. Miraré a ver si lo consigo. Saludos!
ResponderEliminarPues ya nos dirá que le parece si finalmente decide leerlo.
EliminarGracias por su aportación, Karen.
Por Dios, Olethros, visto el tostón que parece ser la novela, hay que reconocer que su paciencia está hecha a prueba de bombas. Yo dejo a un lado un montón de libros por mucho menos. Saludos.
ResponderEliminarQue conste que la palabra "tostón" la usa usted y no yo, pero gracias por sus ánimos y por su aportación, Benjamín.
EliminarYo diría que el cien por cien de sus lectores, ha leído la palabra "tostón", entre líneas, Olethros. O quizá sean imaginaciones mias...
ResponderEliminarYo no puedo controlar lo que ustedes entienden, sólo lo que yo escribo. Con eso no quiero decir que esté usted equivocado ni todo lo contrario.
EliminarGracias por su aportación, Benjamín.
Es usted claro, como un libro abierto, señor Olethros. No se puede decir más, diciendo tan poco. Evidentemente, este debate es estéril, como las arenas de Marte. Saludos, amigo mío.
Eliminar;oP
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